Basta una pequeña mirada en su set de pinceles (o ver la única brocha que tienen en el cosmetiquero), para notar un montón de pelos sucios, con maquillaje quizás de cuando, inclusive con mal olor. Ahí viene mi cara de espanto condimentada con una pizca de asco y la siguiente pregunta: “¿Ésta es tu brocha?” A lo […]