Muchas ya comienzan a sacar la ropa de encima y a lucir más piel, pero esas mismas son las que no quieren verse blancas de pronto, así que optan por acelerar el color de alguna forma, una de ellas: el autobronceante.
Anaranjadas, manchadas, resecas, con rayas, en fin, muchos son los reclamos por el mal procedimiento o calidad del producto, pero siguen intentando una y otra vez para obtener ese colorcillo deseado para verano.
RECOMENDACIONES ANTES DE AUTOBRONCEAR
- Escoge el producto que no esté en oferta, los colores de estos productos son muy sensibles al vencimiento y podrías quedar manchada.
- Compra dos unidades: uno de cuerpo y otro de rostro, son químicos dedicados para cada zona y proteger partes sensibles del cuerpo.
- En el listado de químicos no debe aparecer la palabra YODO por ningún motivo o quedarás con ese horrible color naranja.
- Debes exfoliar el cuerpo e hidratarlo por una semana, a diario, para que el cuerpo pierda todo rastro de células muertas y oleosidad, unificando el color autobronceante.
MIENTRAS AUTOBRONCEAS…
- Es un trabajo delicado, toma tu tiempo y no lo hagas rápido o corres riesgo de manchar en exceso o repasar la misma zona quedando más oscura por partes.
- Son movimientos circulares los que te ayudarán a dejar un acabado uniforme y de fácil absorción corporal.
- Nudillos, rodillas y talones son partes que deben ser tratadas con más cuidado y menos producto para no manchar.
- Busto, nuca, tras las orejas y espalda no deben ser descuidadas, pide ayuda para llegar a todas y no ver piel sin producto.
- Nunca apliques producto sobre las cejas el folículo piloso es muy grueso y se verá sucio y maltratado.
¿UNA VEZ AUTOBRONCEADA QUE SE DEBE HACER?
- Espera cinco minutos antes colocar tu ropa, más que nada porque las telas podrían absorber ciertas partes del producto y dejar un acabado disparejo.
- Si te deshidratas perderás el bronceado más fácil, bebe abundante agua.
- No uses jabones ni artículos de limpieza en la ducha que contengan ácido glicólico o te despigmentará rápidamente.
- En las duchas diarias no fricciones en exceso el cuerpo, eso obligaría al cuerpo a eliminar color.